Este es un material más delicado, especialmente porque gran parte de la belleza de éstas velas es la transparencia del material que debe ser tratado con mucho cuidado para conservarla.
A partir de gel preparado, tal como se obtiene en casas especializadas, pueden elaborarse velas, cuya transparencia brinda un sinfín de posibilidades.
Para elaborar velas de gel, al igual que con las de parafina, debes calentar el mismo, a baño María. Sin embargo, deberás extremar tus cuidados, puesto que este material es mucho más sensible al vapor.
Evita que gotas del mismo entren en contacto con el gel, de lo contrario, la humedad hará que pierda transparencia y que su aspecto se torne opaco.
Revuelve el gel, a medida que se vaya licuando, para que se derrita uniformemente. Cuando esté completamente derretido, viértelo en el recipiente que hayas elegido para tal fin.
A la hora de seleccionar un buen recipiente para tu vela de gel, ten en cuenta que ésta no es desmoldable, por lo que el mismo pasará a formar parte del producto terminado. Por tal motivo, se utilizan recipientes transparentes, en especial, de vidrio. Asegúrate, que el grosor de las paredes es suficiente, como para resistir la alta temperatura del gel caliente.
Cuando comience a enfriar y solidificar, deberás introducir el pábilo.
Cuando comience a enfriar y solidificar, deberás introducir el pábilo.
Por otra parte, podrás incorporar color y aroma a tus velas de gel, mediante el empleo de colorantes líquidos y esencias especiales, que podrás adquirir en casas especializadas.
Estas velas son de las más llamativas, si las haces con cuidado y dedicación el resultado es muy profesional y realmente se admirarán tus habilidades.
Anímate a hacerlas, regálalas o úsalas para decorar tu hogar!
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